Autor Marco Antonio Sanabria
Muy pocos definirían al tiempo libre como el tiempo de una persona desempleada, ni siquiera los mismos desempleados. Bruce Austin (1988) habla sobre el tiempo libre antes de tratar las motivaciones de las audiencias de cine (en inglés como leisure, se refiere principalmente a ocio, pero entre otros significados que se dan en los diccionarios está el tiempo libre ); interpretando las palabras de Austin, se concluye que el tiempo libre se refiere al tiempo empleado en actividades no obligatorias y que es seleccionado de una manera consciente y personal; además que es el tiempo esencial para el bienestar psicológico y fisiológico.
Sin embargo sobre estos dos términos hay muchas definiciones; así e.g. se dice que el ocio es el tiempo que no se trabaja, lo cual le da una connotación negativa, aunque también puede interpretarse de una forma positiva. El tiempo libre se denomina con otros términos extranjeros, como leisure y loisire, con interpretaciones sobre el medio o la forma para encontrar libertad y creatividad.
El tiempo libre es lo mismo que el tiempo total menos el tiempo dedicado a obligaciones, el tiempo libre es totalmente diferente al tiempo trabajado. El tiempo dedicado a obligaciones se emplea en tres tipos de obligaciones que son:
A. Obligaciones primarias, e.g., el trabajo y el estudio.
B. Obligaciones secundarias, e.g., viajes y tareas domésticas.
C. Obligaciones fisiológicas, e.g., dormir o comer.
Un concepto del tiempo libre puede ser el siguiente:
“El tiempo libre es aquél del cual dispone el individuo, fuera de sus necesidades inevitables y obligaciones profesionales, familiares y sociales”.[1]
Otro concepto de tiempo libre es el dado por J. Dumazedies y dice así:
“Se trata de las ocupaciones durante las cuales el individuo puede dar de sí mismo plenamente ya sea para relajarse o distraerse, ya sea para desarrollar su participación social voluntaria o sus conocimientos o sus formación desinteresada después de ser liberado de sus obligaciones profesionales, familiares o laborales”.[2]
Se pueden observar algunas características de la definición anterior, entre las que se destacan las siguientes:
1. Como lo contrario al trabajo, entendido como función económica.
2. Implica el sentido de descanso placentero.
3. Implica una sensación de libertad.
4. Tiene frecuentemente una relación con los valores de la cultura y la sociabilidad.
5. Tiene un notable grado de no utilitarismo.
En realidad el ir a una proyección de una película o al vídeo club para alquilar y luego verla en el VCR, no son más que dos formas diferentes de usar el tiempo libre. Por lo tanto dichas actividades no cubren el total del uso del tiempo libre ni todas las formas de recreación y entretenimiento.
Alberto Sessa[3], hace la clasificación de tres categorías en cuanto al uso que hace el hombre del tiempo, ellas son:
1. El tiempo de vida natural o biológico
2. El tiempo de trabajo
3. El tiempo libre
Según esa clasificación, el tiempo de vida natural o biológico se refiere al que el hombre dedica a satisfacer sus necesidades vitales como alimento, aseo e higiene, dormir, realizar sus necesidades fisiológicas y otras. En el caso del tiempo de trabajo, se trata de las actividades remunerables básicas para el sustento de cada uno, y se incluye además el tiempo necesario para trasladarse hasta el trabajo. Finalmente con respecto al tiempo libre se refiere al que se utiliza para disfrutar del ocio, o sea el tiempo que se dedica a las actividades de esparcimiento, la distracción o el entretenimiento.
El tiempo libre para disfrutar del ocio, también puede dividirse en tres categorías[4], estas categorías están dadas en función de los períodos más significativos en los que se presenta. Entonces se clasifican:
1. El tiempo libre de fin de jornada que se da entre semana.
2. El tiempo libre de fin de semana, los sábados y domingos.
3. El tiempo libre de vacaciones, generalmente en el verano.
Ahora que se tiene más claro el concepto del tiempo libre, también es lógico comprender que es muy difícil que una persona dedique su tiempo libre (del tipo que sea) solamente a una actividad como es ver una película de cine en una sala cinematográfica o por medio de un vídeo. Nada impide que la misma persona dedique su tiempo libre a otras actividades recreativas, de entretenimiento y demás que ofrecen también la TV, el teatro, los circos, una discoteque, el turismo, el deporte, y muchos otros.
El tiempo libre sirve para muchos propósitos, Austin (1988), menciona dos propósitos principales del mismo. El primero de los propósitos del tiempo libre se refiere a su utilidad para balancear, corregir y compensar las tensiones, fatiga y obligaciones de un día de trabajo; y el segundo de los propósitos es el del tiempo libre visto como una forma de proveer de cosas esenciales como la autorrealización, crecimiento, satisfacción y autoexpresión.
Un estudio hecho en 1983[5], señaló cuatro formas generalizadas de motivaciones para el tiempo libre, las cuales son:
1. Intelectuales, para ampliar los intereses, buscar estímulos, ser creativo o satisfacer la curiosidad.
2. Sociales, para encontrar compañía, hacer amistades, ganar respeto y aceptación (pertenencia a un grupo), para conocer otras personas.
3. Competición y dominio, para tener logros propios y reconocidos, aumentar conocimientos, destrezas y capacidades para retos.
4. Evitar ciertos estímulos, en los que se evitan los contactos sociales, se busca el descanso y recuperarse del stress.
En otro estudio realizado en 1983,[6] (en los que 1.000 personas fueron entrevistadas), se dieron 14 razones, todas ligadas a los cuatro tipos generalizados de motivos dados anteriormente.
Dichas razones, para sólo mencionarlas por categoría fueron:
A. Sociales: (1) pasar el tiempo con la familia, (2) compañía y (3) ayudar a otras personas.
B. Intelectuales: (4) el cambio para aprender otras cosas, (5) pensar y reflexionar, (6) mantenerse informado sobre lo local, nacional o de otros eventos mundiales, (7) creatividad, (8) excitante y (9) enriquecimiento cultural.
C. Competición y dominio: (10) ejercicio, (11) reto y (12) competencia.D. Evitar los estímulos: (13) relajante y (14) olvidarse del trabajo y preocupaciones de la vida diaria.
[1]UNESCO. Instituto para la juventud. Congreso de Gauting, 1958.
[2]Gutiérrez, Miguel Ángel. El tiempo libre. San José, C.R.: Universidad Internacional de las Américas, 1989.
[3]Sessa, Alberto. Ensayos de turismo, Colección Biblioteca de la Cooperación Nacional de Turismo de Colombia. Bogotá, Colombia. 1980.
[4]Acerenza, Miguel Ángel. Administración del turismo. Conceptualización y organización. Primera edición, México, D.F. Editorial Trillas, 1984. pp. 277.
[5]Beard, Jacob G. and Ragheb, Mounir G. “Measuring leisure motivation”. Journal of leisure research. (15 (3)): 219-218, 1983.
[6]United media enterprises. “Where does the time go? The United Media Enterprises report on leisure in America”. Newspaper Enterprise Association Inc. New York, 1983. p. 21.
jueves, 1 de julio de 2010
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